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La termoterapia a base de parafina es un tratamiento muy natural que humecta las capas profundas de la piel ayudando a hidratarla, nutrirla y rejuvenecerla. Este proceso de hidratación extra se produce porque la parafina crea un efecto oclusivo para que la humedad de la piel no se evapore y se deposite en las capas más profundas de la piel, lo que evita la deshidratación transepidérmica.
Después de calentar la parafina en la aparatología indicada, sumergir las zonas a tratar de 4 a 5 veces hasta formar un guante de parafina. Proseguir a envolver la zona y dejar actuar 15 minutos. Para finalizar, se retira la parafina con suavidad y se masajea la zona con una crema hidratante para manos y/o pies.
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